Los desarrolladores de los paneles SunWay están tratando no solo de cumplir con las expectativas del consumidor, la compatibilidad con las normas legales, sino también crear unas condiciones y normas que anteriormente ni siquiera se discutían en el tema de los dispositivos térmicos. La rentabilidad, seguridad, compacidad, movilidad, facilidad de controlar, beneficios y mucho más se presentan en los sistemas de calefacción SunWay.
En el modo de máxima eficiencia térmica, el panel consume 50 W/m2. Si el panel está equipado con un termostato, este indicador cae en un 40-60%.
El ahorro de energía y, en consecuencia, de dinero, garantiza un mínimo del 30% de las opciones de calefacción alternativas que se ofrecen actualmente en el mercado.
Los paneles equipados con un termostato permiten no solo controlar el clima interior, sino también ahorrar en el consumo de energía, en contraste con el modo de encendido estático.
A diferencia de muchas tecnologías competitivas, los paneles/convectores infrarrojos SunWay no queman oxígeno.
Las tecnologías de calentamiento de onda larga producen calor suave y no agresivo que no seca el aire, y el calor se distribuye uniformemente en el espacio, no solo cerca de la fuente.
El panel clásico no tiene "respiraderos" y no está equipado con un ventilador. El aire no pasa a través del panel y, por lo tanto, el polvo no entra y no sube con el calor.
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